MÉXICO, D.F., (apro).- El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, dijo que los conflictos que se viven en Michoacán no le competen a la capital del país, pero han afectado a sus habitantes, y demandó al gobernador de la entidad, Fausto Vallejo, que busque una solución “inteligente” a la problemática.
“Creo que aquí estamos viendo los resultados, los efectos, los conflictos generados en otro lado, mejor que se dedique a ponerle un remedio inteligente a lo que es ajeno al Distrito Federal”, dijo Ebrard en entrevista.
La declaración del mandatario capitalino se dio luego de que hace dos días un grupo de encapuchados tomó la sede del gobierno de Michoacán en esta capital, ubicada en la colonia Nápoles, y con palos y tubos amagaron a los trabajadores del lugar.
“No fue una manifestación pacífica, porque estaban encapuchados, con cadenas, palos, chacos y arrancaron las líneas telefónicas cuando se percataron que llamamos a la policía”, refirió ayer Nancy Cárdenas, titular de la representación de Michoacán, quien calificó de “acto vandálico” la manifestación.
Ebrard detalló que por ese caso, la Procuraduría General de Justicia del DF tiene abiertas dos averiguaciones previas.
Por separado, Fausto Vallejo aseguró que grupos radicales, que no especificó, “son los que tienen metido al estado en la desestabilización”.
Al referirse al conflicto de los normalistas y la decisión del Poder Judicial estatal de dejarlos en libertad mediante el pago de una fianza, el gobernador de Michoacán aseguró tener evidencias de que grupos radicales ligados a partidos políticos de izquierda intervinieron en los disturbios de los últimos días, y señaló que la acción de los normalistas “fue planeada”.
25 DE OCTUBRE DE 2012 1 COMENTARIO
NACIONAL
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