Las armas que han servido a los carteles de las drogas en México, para cometer un sin numero de asesinatos y secuestros, al día de hoy los gobiernos de México y EU no han sabido como explicar el como y el porque de su gran negligencia.
(Con información de Notimex)
La operación “Rápido y Furioso”, de trasiego de armas a México, fue una “estrategia deliberada” del Departamento de Justicia contra el cártel de Sinaloa, sostuvieron legisladores republicanos de la Cámara de Representantes.
Los correligionarios de Mitt Romney aseguraron que el procurador Eric Holder concentró esfuerzos para combatir a la organización criminal que lidera Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”, lo cual quedó plasmado en un documento llamado “Estrategia del Departamento de Justicia para combatir a los cárteles mexicanos” de 2009.
“Como parte de esta estrategia, el Departamento de Justicia tomó la decisión táctica de cambiar el foco de arresto de intermediarios de la compra de armas, a la identificación de grandes redes de tráfico ilegal”, expone el sumario ejecutivo del Partido Republicano.
El reporte muestra la posición del Departamento de Justicia en donde señalan que el decomiso de armas no eliminaría el problema del tráfico de productos letales a México.
“Debemos identificar, investigar y eliminar las fuentes de las armas traficadas ilegalmente y las redes que las transportan”, según la estrategia del gobierno federal.
Los republicanos utilizaron el reciente reporte del Inspector General que encontró negligencia en la implementación del operativo, para justificar su demanda en las cortes a fin de que la administración de Obama entregue documentos adicionales del caso.
El ex jefe de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF por sus siglas en inglés), Ken Melson, testificó ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de la oficina de Phoenix, Arizona, donde se originó “Rápido y Furioso”.
“Este reporte revela fallas de administración generalizadas dentro de la jerarquía del Departamento de Justicia”, dijo este lunes Darrel Issa, el presidente del comité mencionado.
Aunque el reporte exoneró a Holder de cualquier responsabilidad, criticó a tres funcionarios, el ex subprocurador Gary Gindler, el procurador adjunto Lanny Breuer y el subprocurador adjunto Jason Weinstein, entre otros.
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